La firma es un elemento esencial e indispensable en la carta. Es precisamente lo que da valor, a lo que la carta comercial expresa. La firma da autenticidad al mensaje y ademàs significa que alguien se hace responsable por el mismo. El uso y la experiencia aconsejan que es mejor escribir en el procesador de texto o en la máquina, el nombre de quien firma la carta, dejando un espacio prudencial (4 espacios) entre la última línea del saludo y la firma propiamente dicha; para que la persona responsable estampe su firma manuscrita en el espacio en blanco. Ejemplo:
Muy atentamente, Juan Pérez
El nombre escrito mecánicamente facilita enormemente el entendimiento y reconocimiento de la firma manuscrita. Así mismo convengamos que muchas firmas son ilegibles. Por lo que al contestar una carta, se escriba el nombre de la persona de la forma correcta.
En algunos casos, se acostumbra también indicar el cargo de la persona que firma la carta, lo que se hace inmediatamente debajo del nombre. Ejemplo:
Juan Pérez Jefe de Ventas
Muy atentamente, Juan Pérez
El nombre escrito mecánicamente facilita enormemente el entendimiento y reconocimiento de la firma manuscrita. Así mismo convengamos que muchas firmas son ilegibles. Por lo que al contestar una carta, se escriba el nombre de la persona de la forma correcta.
En algunos casos, se acostumbra también indicar el cargo de la persona que firma la carta, lo que se hace inmediatamente debajo del nombre. Ejemplo:
Juan Pérez Jefe de Ventas